Conflicto de desvalorización relacionado con el movimiento: “Moverme y no poder moverme”; en el deporte, trabajo o en cualquier actividad que realizo a diario o que me gustaría realizar.
Hemos de tener en cuenta, para descifrar específicamente el conflicto, la parte del cuerpo afectada, articulación, cartílago, tendón, músculo, etc.
“Ya no camino tan rápido como antes”
“No puedo hacer mi tarea tan bien, como la hacía antes”
“Me subestiman porque no tengo la fuerza que tenía hace años”
“Valgo muy poco por lo que hago y por mi manera de moverme”.
“No soy capaz de moverme bien, de hacer esto o aquello”.
Reumatismo crónico: Se manifiesta cuando me muestro dispuesto a continuar haciendo aquello que me gustaba, porque estoy convencido de que aún puedo hacerlo pero, en el último momento, me asalta el miedo acerca de “puedo” pero, “tal vez no pueda” y caigo en una nueva auto desvalorización.
¿De verdad ya no voy a poder subir a diario a la montaña? Creo que ya no hay vuelta atrás, definitivamente, ya no puedo hacerlo más.
Otros conflictos que pueden causar reumatismo: Miedo a no sentirme lo suficientemente valioso y reconocido por mi pareja, padres, hijos, etc.
Relacionado con sentir que, de alguna manera, estoy fallando y no puedo complacer, ayudar a alguien.
“Siento haber llegado tarde y no haberte podido ayudar”
“Siento no poder ayudarte a…”
Si el reumatismo afecta a la articulación, expresa una desvalorización relacionada con no ser capaz de retener a alguien, del cual nos sentimos muy apegado.
“Quiero conservar a alguien a mi lado, conservar sus movimientos”.
“No quiero que mi pareja se vaya”
¿Qué desvalorización he vivido o estoy viviendo?
Estoy centrado/a en mi poder. Me respeto, me amo y me apruebo.
Si desea conocer más acerca del origen emocional de las enfermedades o saber sobre el propósito del alma puede adquirir mis libros haciendo clic sobre el enlace de Amazon: